José Antonio Vázquez Freire explicó a María Dolores Fernández Galiño que esta situación se ha visto agravada con la pandemia. De hecho, señaló, desde la declaración del estado de alarma hasta la primera quincena del mes de septiembre se registró a un descenso del 56% en la contratación de trabajadores con discapacidad con respecto al mismo periodo de 2019, siendo las personas mayores de 55 años las más afectadas, con una bajada del 71% en las contrataciones.

Asimismo, el presidente de Cegasal solicitó a la valedora do Pobo su apoyo para que las instituciones públicas prioricen en sus contratos a los centros de empleo sin ánimo de lucro frente a los que sí lo tienen: “Todos los beneficios que obtienen las empresas que representamos se reinvierten en más puestos de trabajo, más líneas de actividad o mejores condiciones económicas para los empleados”. En este sentido, el presidente de Cegasal apuntó que “nuestros centros no buscan hacer negocio con las personas con discapacidad, sino facilitar una salida profesional a gente que tiene muy difícil su acceso al mercado laboral”.

Vázquez Freire reconoció ante la Valedora el “paso atrás” que ha dado la economía social por culpa del coronavirus, al tiempo que insistió en la necesidad de que se reactive la Mesa de Seguimiento de los Contratos Reservados a Centros de Iniciativa Social, paralizada desde hace varios meses por la crisis sanitaria.

Cegasal, pionera en el modelo de economía social

La Asociación Gallega de Centros Especiales de Empleo sin Ánimo de Lucro se fundó hace 23 años y en la actualidad cuenta con 32 centros asociados, de sectores como alimentación, textil, jardinería, artes gráficas, joyería, mantenimiento y lavandería, entre otros.