El presidente de la Cámara de Tui, Gumersindo Alonso, expresó el "desconcierto" que causan las voces discordantes que reclaman una redefinición del trazado ferroviario del Corredor Atlántico cuando lo que urge es "poner en marcha los recursos y la ejecución de las obras".

“Es una infraestructura fundamental para Galicia y aquí la cuestión no es si el trazado pasa por aquí o por allí. El auténtico problema es que mientras no exista la conciencia de las consecuencias de carecer de una conexión ferroviaria moderna y eficiente entre la Meseta y el Noroeste, que nos conecte con Europa, todo el tejido empresarial pierde competitividad”, apunta Alonso.

“Es todo o nada y ahora mismo, tenemos nada. No podemos arriesgarnos a retrasar aún más esta vía de comunicación vital para nuestras empresas por diatribas internas. De nuevo queda de manifiesto que los localismos son excluyentes”, agregó el presidente de la Confederación de Empresarios de Pontevedra, Jorge Cebreiros.

Durante un reciente encuentro entre la Cámara de Tui y la CEP, los asistentes recordaron que hace casi un año (27 febrero 2019) que las autoridades europeas advirtieron al entonces Gobierno en funciones sobre el retraso en las inversiones y recomendaron acelerarlas para mejorar la competitividad económica.

“Este es un gran ejemplo de que sin un Gobierno fuerte y estable, todo queda en el aire y no se avanza. La economía no espera, y los empresarios, motores del empleo y el progreso -y por ende la sociedad civil-, sufrimos las consecuencias. Galicia no puede permitirse el lujo de nuevos retrasos”, sostuvo el Presidente de la CEP.

Tras la movilización del empresariado del noroeste español, al que se sumó la alianza formada por los Gobiernos de Galicia, Asturias y Castilla y León, se logró que la Comisión Europea aprobase en junio de 2018 la ampliación del Corredor Atlántico.

La Salida Sur hacia el Norte de Portugal también es fundamental para los empresarios, que son conscientes del volumen de negocio activo en la franja fronteriza más dinámica económicamente de la Unión Europea. “No podemos olvidarnos de que cada vez hay más transferencia y movilidad y que es necesario dotar de infraestructuras logísticas modernas y competitivas a la Eurorregión”, señala Alonso con el respaldo de Cebreiros.

Un informe de ADIF sobre las prioridades 2019-2025, apuntaba a las actuaciones entre León y Vigo, con la prolongación hasta A Coruña a continuación. El mismo informe destaca que los beneficios económicos para Galicia se cuantifican en un recorte de tiempos de tránsito del 6,8% para los pasajeros y 30% para las mercancías. En términos ecológicos, también habría un impacto muy positivo nada desdeñable: se estima que su puesta en marcha ahorraría 71,6 millones en emisiones de CO2 hasta 2030.

“Todo son ventajas”, subrayan los presidentes de la CEP y la Cámara de Comercio de Tui. “El Corredor Atlántico está llamado a ser uno de los tres más rentables de toda Europa, junto al Mediterráneo y al Escandinavo. ¿A qué esperamos?”, concluyen.