Cuestionan el cambio de criterio por parte del Gobierno central
La cadena de valor de la madera alerta de las consecuencias del posible cierre de Ence
La cadena de valor de la madera de Galicia ha valorado en rueda de prensa en Pontevedra las consecuencias que tendría la marcha de Ence para la economía y el rural gallego.
A la rueda de prensa asistieron José Manuel Iglesias, presidente del Cluster da Madeira e o Deseño de Galicia; Elier Ojea, presidente de la Federación Empresarial de Aserraderos y Rematantes de Madera de Galicia, Daniel Díaz, presidente de la Asociación de Empresarios de Primera Transformación de la provincia de Lugo, y Patricia Sánchez, técnica de la Asociación Sectorial Forestal de Galicia.
Los portavoces de la cadena de valor de la madera manifestaron su "gran preocupación por el daño ya causado con la incertidumbre que la actual situación ha generado en miles de familias y profesionales del sector, así como con la retracción de las inversiones que ya estaban previstas en el sector, tanto por parte de la compañía como por la red asociada a su actividad". En esta línea, desde el sector aprecian una gran angustia por parte de las familias y profesionales que ven en riesgo su sustento, así como el pago de las inversiones, tanto realizadas como previstas.
En este sentido, la cadena no entiende la incongruencia por parte de algunos partidos políticos que defienden el cierre en Pontevedra -puesto que un traslado no es posible, tal y como confirman informes de expertos independientes- y, en cambio, se oponen al cierre de Alcoa y Meirama, "sin tener en cuenta la gran importancia de Ence para el sector forestal y el haber demostrado, sobradamente, cumplir de forma holgada con todas las exigentes normas ambientales, hasta el punto que las Cofradías de Pescadores de Pontevedra apoyan la prórroga de Ence".
Impacto en empleo, inversiones y en el medio rural
El sector maderero estima que el cierre de Ence supondría la pérdida de 5.100 empleos en Galicia; más de 2.000 en el sector forestal,"que contribuyen a fijar población en el rural". Además, su marcha significaría la pérdida de 90 millones de euros, distribuidos en la cadena de valor forestal: propietarios forestales, empresas de selvicutura, aprovechamiento forestal, rematantes, transportistas, viveros… "Esta cifra se hubiera visto notablemente aumentada, si el Gobierno no hubiera afectado, con su decisión, al desarrollo, en Pontevedra, del Plan Estratégico anunciado por Ence a principios de año", señala el comunicado remitido por la cadena de valor de la madera.
Finalmente, los representantes de este sector afirman que "si se llega a producir el cierre de Ence, el sector forestal se encontrará en una situación demoledora, al haber perdido uno de sus ejes tractores, lo que llevaría al incremento del abandono del monte y, consecuentemente, al incremento de incendios e impactando, muy negativamente, en el mercado de la madera".