El decano del COETTGA, José M. Martínez, afirma que "este aumento en la demanda de medios telemáticos y de telecomunicaciones ha constatado la significativa brecha tecnológica, que penaliza las zonas del rural, y que vecinos e instituciones llevan denunciando durante los últimos tiempos".  Añade el decano que "a pesar de que ha habido un gran avance en muchas zonas, todavía quedan muchos puntos oscuros en el rural gallego".

De no ser por los sistemas de telecomunicaciones y las nuevas tecnologías sería impensable continuar con la vida normal y el país se paralizaría por completo lo que supondría un número ingente de empleados al paro y la imposibilidad de continuar con la formación educativa a distancia.

Teletrabajo.

Hay empresas que ya aplicaban el teletrabajo desde mucho antes de esta situación. David Saavedra, ingeniero técnico de Telecomunicaciones teletrabaja para Panel Sistemas desde el rural lucense. Realiza operaciones a nivel mundial y comenta su experiencia: “Llevo 7 años teletrabajando, de los cuáles, casi 5 son desde el rural gallego. Hoy en día con sistemas como Wimax o 4G ya se puede trabajar sin problema en las zonas rurales, incluso algunas ya tienen acceso a fibra o a sistemas de ADSL de buena calidad. Mi empresa, gracias a que permite el teletrabajo en gran medida a casi todo el mundo, desde hace más de una semana ha podido evitar contagios en su plantilla, ya que promueve el trabajo desde casa a cerca del 80% de los trabajadores. Gracias a tener una buena planificación, estamos trabajando con normalidad, incluso más que en semanas pasadas”.

Brecha tecnológica

Existe la cara B de esta crisis: la brecha digital. Según datos del Ministerio de Economía, más de 3,2 millones de habitantes tienen una conexión a Internet deficiente con una velocidad menor a 10MB. La situación es aún más grave para cerca de 1 millón de personas con un ancho de banda que no llega a los 2MB.

Familias, pueblos enteros, que non tienen acceso a Internet. La brecha tecnológica es una batalla constante de los graduados eingenieros técnicos de Telecomunicaciones. Probablemente, en estos días de aislamiento social que estamos viviendo, es más importante que nunca estar conectados con nuestros seres queridos, ayudar a sobrellevar la incertidumbre de esta situación desconocida para la sociedad. Halar, comunicarse, socializar sin tener contacto físico…algo imposible sin las telecomunicaciones. Diariamente son muchas las familias con niños que no tienen un acceso o conexión a la red, ya sea por un panorama telemático deficiente o por carecer de recursos económicos. Para ellos es impensable poder seguir las clases virtuales de las escuelas o universidades. Esta situación nos lleva a plantear algunas cuestiones como la necesidad de una tarifa social o de cerrar las brechas tecnológicas que existen en la población. "La principal brecha rural que hay ahora es la legislación. Porque va muy por detrás da tecnología. Hace 50 años, la electricidad llegó a la última casa costase lo que costase, porque así se legisló; pero ahora, eso no se está haciendo." afirma Xosé M. Blécua, alcalde de San Xoán de Río y vocal do COETTGA. A lo que añade: "ahora mismo, por ley, lo único que se obliga es a tener telefonía fija por cable y velocidad de 1MB por segundo. Todos sabemos que la telefonía fija esta desapareciendo. Y también sabemos que una suficiente decente son de 30MB". Blécua concluye diciendo que "siempre quedan sin avances los habitantes del rural. El 5G en el rural no lo imos a ver mientras no se legisle, porque no sale rentable. En nuestro ayuntamiento tenemos 59 núcleos de población, de los que sólo 1 supera los 30MB". 

Segundo Dividendo Digital

El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha suspendido este fin de semana, y hasta que se den las condiciones adecuadas, las actuaciones de cambios directos de canales radioeléctricos dentro del procedimiento de liberalización del Segundo Dividendo Digital, después de la publicación del Real Decreto 463/2020. Las provincias de Ourense y Pontevedra estaban inmersas en el proceso de liberalización de la banda de 700MHz, conocido como Segundo Dividendo Digital, para que pueda ser utilizado para tecnologías de Banda Ancha Móvil. "El Segundo Dividendo Digital queda suspendido, lo que seguramente retrasará la implementación del 5G en estas zonas, afectando a casi un millón y medio de personas, que precisamente viven en algunas de las comarcas más desfavorecidas", explica Martínez.