Con estas financiaciones, se estima que la sociedad de garantía recíproca de las provincias de A Coruña y Lugo, contribuyó a sostener cerca de 12.000 empleos.

Estos datos se comunicaron durante la celebración de la junta general ordinaria de aprobación de las cuentas de 2020 de la sociedad de garantía recíproca (SGR). Antonio Couceiro, presidente de Afigal, aseguró que "Afigal se ha mostrado como un actor próximo y comprometido durante la crisis, permaneciendo al lado de pymes y autónomos, facilitándoles su viabilidad y el mantenimiento del empleo. Y, sin duda, tendremos un importante papel que ejercer en la recuperación de la economía”.

El perfil de las empresas que han recibido financiación de Afigal con motivo de la actual crisis derivada de la pandemia durante 2020 son fundamentalmente microempresas y autónomos del sector terciario, donde se incluyen actividades especialmente afectadas como son las de servicios, comercio y hostelería. La SGR alcanzó al cierre de 2020 la cifra de 12.462 empresarios asociados.

Aquisgrán, una nueva vía de financiación crediticia directa de las SGRs

En la Junta, también se informó de que las empresas socias de AfigalL podrán acceder al fondo de titulización Aquisgrán, que acaba de lanzar SGR-CESGAR, la asociación que reúne a las 18 sociedades de garantía recíproca de España y que también preside Antonio Couceiro. Se trata de una iniciativa pionera diseñada por Intermoney que, con financiación inicial del Fondo Europeo de Inversiones (FEI), el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y Banco Caminos, y respaldada por el Ministerio de Industria a través de CERSA, permitirá a las pymes españolas acceder a los mercados de capitales, ampliando y diversificando sus fuentes de financiación.

Aquisgrán mejorará el acceso al crédito a pymes y autónomos, diversificando sus fuentes de financiación más allá del canal bancario tradicional, y captando fondos en el mercado de renta fija. Aquisgrán inaugura una forma de financiación nueva en Europa, muy escalable, y que permitirá a los inversores tener una exposición directa a las pymes, que son la columna vertebral de la economía europea.

Adhesión al Código de Buenas Prácticas

Por otra parte, el consejo de administración de Afigal aprobó la adhesión al Código de Buenas Prácticas voluntario que tiene como objetivo apoyar la solvencia de empresas y autónomos que recibieron financiación avalada, facilitando la renegociación de su deuda. Para ello, este código contempla tres medidas: la posibilidad de extender el plazo de amortización de los créditos avalados, la de mantener el aval cuando los créditos se conviertan en préstamos participativos y la de acordar una reducción de deuda y realización de transferencias. Este Código de Buenas Prácticas fue aprobado en Consejo de Ministros el pasado 11 de mayo.