El secretario de Arigal, Roberto Almuiña, detalló que las 70 canteras y graveras gallegas están operativas, y se encuentran a un 49% de actividad, después del parón entre el 30 de marzo y el 9 de abril en el que la actividad se había visto reducida al 17%. 

El sector de los áridos demandó a las autoridades "una progresiva vuelta a la normalidad productiva, garantizando siempre la seguridad de la salud de los trabajadores", y para ello trasladaron al conselleiro de Economía una serie de medidas, como que se garantice la disponibilidad de EPIs a precios razonables y que la Inspección de Trabajo o el ISSGA revise las medidas adoptadas en las empresas. 

Arigal también reclama una "reactivación urgente y controlada de la actividad constructiva, aludiendo a diferentes acciones que se pueden tomar en el corto plazo, como que se activen los trabajos de certificación de obras ejecutadas, se adjudiquen y ejecuten las obras ya licitadas, y que se cumplan los pagos pendientes. En el medio plazo, se piden líneas de crédito específicas para el sector, y medidas de flexibilización y agilización de la tramitación administrativa. "La amenaza del cierre temporal de explotaciones, está ahí por lo que es imprescindible flexibilizar los ERTEs y EREs, y acompañarlo de medidas de suspensión de las obligaciones con Hacienda y Seguridad Social y de contratos de energía eléctrica", piden desde Arigal.

Medidas tomadas por la Administración autonómica

En la videoconferencia, el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, expuso "la plena consciencia de la Xunta del gran esfuerzo que están realizando las empresas del sector  de los áridos,  para poder mantener el 100% de sus plantillas, por el escaso número de ERTE´s solicitados". También destaco que el 90% de los ERTEs solicitados se han resuelto positivamente, y mediante resolución de la autoridad laboral, lo que redunda en una mayor seguridad jurídica.

Francisco Conde les confirmó que se ha dado orden a la Axencia Galega de Infraestruturas de reactivar todas las obras de construcción, ejecutar todo lo licitado, y agilizar licitaciones, destacando que hasta la fecha, se han reactivado 500 obras en Galicia.

En lo referido a las líneas de financiación del circulante para paliar la difícil situación actual, el conselleiro explicó que además de las líneas ICO del Estado, la Xunta a través del Igape ha puesto en marcha una orden de ayudas para acceso a liquidez, dirigida a las pymes, por medio de préstamos avalados por las sociedades de garantía recíproca.

A la petición de mayor agilidad administrativa, tanto Conde como el director xeral de Enerxía e MInas "asumieron la necesidad de dar mayores impulsos, comprometiéndose, en cuanto volvamos a una relativa normalidad, a seguir estudiando las peticiones, con el objetivo de conseguir la imprescindible seguridad jurídica, con grupos de trabajo, como en anteriores ocasiones", trasladan desde Arigal.

Por último, el conselleiro recordó que la Administración gallega ha proporcionado a las empresas del sector las 36.000 mascarillas que habían solicitado, junto con una guía sectorial para la prevención laboral